Crónica de una muerte anunciada es
una novela de Gabriel García Marquez.
Este
autor utiliza un narrador interno y observador para narrar los
hechos.
El
narrador es un amigo del protagonista que nos cuenta las acciones de
este y de los que le rodean. Habla de lo que vive junto a él en un
momento determinado de su vida (el día de su muerte), de lo que él
recuerda que pasó y de lo que le dicen otros personajes. Al usar
constantemente “me dijo” (“Imagínate -me dijo-: hasta me
hubiera alegrado de...) nos ayuda a deducir que el narrador está
implicado en la historia.
Por
una parte, gran cantidad de veces habla con una perspectiva externa,
como cuando nos narra como matan al protagonista sin estar él ahí,
pero por otra, al haber partes en la que el narrador
está presente, ya se deduce que es interno.
Decimos
que también es observador puesto que a lo largo del relato no sabe
ni lo que sienten los personajes ni lo que piensan. Al leer, nos
daremos cuenta de que cuando menciona algún sentimiento, a
continuación hay un “me dijo” o “me contó” (“Me parecía
muy bien que se casaran -me dijo-.)
En
conclusión, opino que el narrador es interno y observador puesto que
explica lo que ve o le dicen y es observador porque no tiene
conocimientos sobre lo que sienten los personajes.
Helena Molina Gundín
No hay comentarios:
Publicar un comentario